Son claras las ventajas de mover el cuerpo, es un antídoto
contra las plagas modernas de la obesidad, el sedentarismo y el estrés.
Lo que no se usa se pierde. La gimnasia física influye en la
mente ya que libera agentes químicos, que como la endorfina, provocan la
sensación de bienestar. Poco se sabe de la gimnasia mental. Se deja operar al
cerebro en piloto automático como si
pudiera en soledad entrenarse en la dura tarea de vivir y progresar. Esta
fórmula no funciona.
La neuroplasticidad es la capacidad del cerebro de
modificarse con el aprendizaje y la experiencia. La memoria se expande por
redes neuronales que reflejan los cambios que producen el aprender, practicar,
entrenarse, trabajar y jugar. La pandemia más grave del siglo XXI será el mal
de Alzheimer porque la edad física se
extenderá pero: ¿de qué servirá si el cerebro no acompaña? Los años vienen solos pero la capacidad debe
activarse. Nunca se detectó el mal de Alzheimer en ajedrecistas famosos.
El ejercicio más completo para rejuvenecer tu cerebro es la
lectura, que se potencia leyendo con ambos hemisferios cerebrales. Mejora la
percepción porque la vista recibe grupos de palabras con sentido propio,
sintetiza conceptos y los convierte en imágenes.
Esto diferencia a la gimnasia mental -dirigida por un
método- de la basada en la fuerza bruta- que te conduce a un cerebro quemado-.
Borges dijo: “no somos lo que somos por lo que escribimos,
somos lo que somos por lo que leemos”. La época actual está poblada de
analfabetos funcionales – personas que sabiendo leer no leen por falta de ganas
o de tiempo-.Ejercicio para rejuvenecer tu cerebro.
No todos construyen un cerebro creativo desde su trabajo,
por lo tanto necesitan realizar una gimnasia mental que lo estimule para
aprender a emprender y a transitar nuevos caminos.
El ejercicio “Disminuye la edad de tu cerebro” mejora el
rendimiento intelectual reviviendo la curiosidad que tenías en la infancia. Si
quieres participar siga estas reglas:
2. Haz click en 'start';
3. Memoriza la posición de los números y clickea los
círculos, partiendo del número menor al número mayor.
4. Al final del juego aparecerá la edad de tu cerebro.
Los que lideran el ranking han rebajado hasta ahora su edad a
19 años. Tú también puedes participar del desafío.
El benchmarking es una técnica para observar, compararse con
los mejores e intentar superarlos. La
sensación de desafío es la clave de cualquier actividad cerebral estimulante y
productiva.
Te invito a acompañarnos en este juego que requiere
velocidad de lectura, comprensión, memoria, concentración, tacto y motricidad.
Una vez que obtengas resultados mejores cópialos y envíalos a
concursos@ilvem.com para participar en el ranking de los top ten.
Volver a la infancia
Debes destruir lo que ya no sirve, lo que te impide crecer.
El hombre no simpatiza con el cambio, cuando comienza a controlarlo y a disfrutar, debe cambiar y ejecutar la destrucción creativa de las ideas que ya no
le sirven.
El peligro del éxito es que nos engaña, porque otros aspiran a él, mejoran lo que
hacemos y entonces, si seguimos haciendo lo mismo estaremos transitando en el
principio del fin. No hay que conformarse con ser líder hoy sino con poder
serlo mañana. Hay que evaluar la situación, descartar riesgos que ofrecen
recompensas poco atractivas, concentrarse en lo importante e integrar el
análisis con la acción.
El retorno al pasado viene del futuro, desde nuestros proyectos. El regreso hace escala en el
presente. Luego construimos el porvenir transformando sucesos aleatorios en
tareas inventadas, para dominarlos con un proyecto transformador. Sin
innovación nos sometemos, renunciamos al presente, sin el desafío de
enriquecerlo con la renovación.
Renovarse es vivir
La destrucción creativa enseña a evitar la pérdida de flexibilidad ante las
oportunidades y a eliminar viejas ideas que te rigen de manera silenciosa. Para
rejuvenecer el cerebro, renacer, reinventar y revolucionar, hay que atreverse a
dejar lo que ya no es, para que crezca
lo que puede ser. Siempre que se gana se pierde algo; siempre que se cierra una
puerta se abre otra. Algo debe andar mal en los ciclos humanos: cuando ganamos
experiencia perdemos imaginación. Como
propone Quino quizás sería mejor:
“La forma en la que la vida fluye está mal. Debería ser al
revés. Uno debería morir primero, para salir de eso. Luego, vivir en un asilo
de ancianos hasta que te rajen cuando ya no sos tan viejo. Entonces empezás a
trabajar. Trabajás por cuarenta años hasta que sos lo suficientemente joven
para disfrutar de tu jubilación. Fiestas, fiestas negras, parrandeadas,
alcohol, salís con mujeres o tipos, qué se yo; hasta que estás listo para
entrar en la secundaria. Después pasás a la primaria, sos un niño que se la
pasa jugando sin responsabilidades de ningún tipo. Luego pasás a ser un bebé,
vas de nuevo al vientre materno, pasás los últimos nueve meses de tu vida
flotando en líquido amniótico hasta que
tu vida se apaga en un tremendo orgasmo. Esto sí que es vida”
Por el Dr. Horacio
Krell
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